miércoles, 14 de septiembre de 2011

El Cordón Umbilical

Los últimos momentos de vida de este maravilloso cordón...



El Cordón Umbilical.

Aunque mucho se ha dicho y se ha estudiado sobre este maravilloso cordón que regala vida, oxígeno y nutrientes al bebé, en los últimos años se ha retomado como tema de estudio y en consecuencia, de controversias.
El cordón umbilical pulsa, y la sangre fluye a través de él empujada por el corazón del bebé, formando parte de su sistema circulatorio. y abasteciendo a cada célula de todo lo que necesita para crecer.

Hasta hace poco, no se le daba mucha importancia, a menos de que se presentara alguna alteración.  Cuando en la escuela de medicina se nos mostró como se atiende un parto había que contar: tres vasos; luego se pinzaba por los dos lados y el cordón se cortaba en medio.  La primera vez que uno lo corta se sorprende de su fuerza y su grosor.  “Esto en vez de cordón parece más bien una cuerda, o una manguera”.  Y, como el bebé tenía que pasar a la cama térmica, el cordón se cortaba en cuanto antes.

Ahora,  nos preguntamos, ¿Por qué sigue pulsando el cordón cuando ya nació el bebé? ¿Tendrá alguna función? ¿Hay alguna justificación clínica, algún beneficio de apresurarse a  cortarlo tan pronto nace el bebé?  Algunos médicos innovadores, tratan de volver a lo natural, nos dicen que no, que no la hay.  Incluso comentan  los beneficios de esperar a que deje de pulsar.   Aquellos médicos que prefieren la tradición, dudan, les cuesta trabajo el cambio.   ¿Hay evidencia de que es mejor no cortarlo? ¿No será perjudicial para el bebé? preguntan.  ¿No se supone que la evidencia es necesaria para hacer una intervención? ¿Cuándo se alteraron los papeles?  Ahora se debe de comprobar que la manera como la naturaleza procede es  mejor que la intervención.

Los estudios se hacen, se escriben y la evidencia está ahí.  El cordón tiene una función que cumplir durante los primeros minutos después del parto. La transición a respirar por los pulmones es gradual, el cordón sigue llevando oxígeno a la sangre del bebé.  También lleva células que le proveen con suficiente hierro para tener reservas y prevenir la anemia durante los primeros seis meses de vida. 
¿Y la cama térmica? Porque mantener el calor es lo más importante, ¿y si el recién nacido se enfría? La naturaleza también proveyó.  La madre es la cama térmica por excelencia. La que además de atender a las necesidades físicas del pequeño, atiende a su espíritu.  El reconocerla, reconforta al bebé, lo tranquiliza.  Su frecuencia cardiaca y su temperatura se regulan rápidamente cuando es colocado sobre el vientre de su madre.  Son los caminos de la naturaleza, gran Maestra. Y además, esta cama térmica tiene un diseño perfecto, ¡viene con el alimento incluido!  Ha estado ahí, todos estos años, solamente había que apreciarla.

Las recomendaciones han cambiado1.  Ahora los ingleses aconsejan esperar, al menos tres minutos, hasta que el cordón deje de pulsar.2  En 2007 se estudió la oxigenación cerebral al cortar el cordón de inmediato o esperando de 60 a 90 segundos. Los efectos fueron evidentes: incluso 24 h después del parto hay una mejor oxigenación cuando el cordón no se corta de inmediato.3  La Academia Americana de Pediatría, hizo una revisión sistemática de la evidencia clínica disponible y llegó al siguiente consenso: “Para el parto de término, no complicado, existe evidencia del beneficio al retardar el corte del cordón desde 60 segundos hasta que el cordón deja de pulsar, después del parto”4.

La evidencia está ahí.  Los padres informados, pueden solicitar al personal de salud que, en el momento del parto, el bebé sea colocado sobre el vientre materno y el cordón permanezca intacto durante, al menos, un minuto. En un país donde el 26% de las embarazadas y 27% de los niños menores de 5 años padecen de anemia (13% de los bebés de 6 a 11 meses6), y donde existen 1.4 millones de niños con desnutrición, 60 segundos de paciencia, es un precio muy bajo a pagar por prevenir la anemia y todas sus consecuencias en los menores de 6 meses de edad5.

 Los beneficios que podemos esperar por la paciencia de los profesionales, son una mejor oxigenación en la sangre del bebé, incluso en su sistema nervioso; un mayor número de glóbulos rojos y suficientes depósitos de hierro para sus primeros seis meses de vida (evitando la anemia que la deficiencia de hierro puede cuasar). 

El cordón cumple con una función: provee de oxígeno al bebé y sangre hasta que los pulmones toman el control, el cambio debe ser gradual, no de golpe.

1.               Barbieri, LR. OBG Management , Vol. 23. June 2011, No. 6 obgmanagement.com
2.               van Rheenen, VF, et al. BMJ Vol. 333. 4 Nov 2006.
3.               Baenziger, O. The Influence of the Timing of Cord Clamping on Postnatal Cerebral Oxygenation in Preterm Neonates: A Randomized, Controlled Trial. Pediatrics 2007;119;455-459.
4.              http://www.aap.org/nrp/pdf/030B.pdf
5.              INEGI
6.              Villalpando S. Salud Pública de Mexico Vol. 45. 2003.



Mas información: en Youtube:
Les recomiendo este excelente video que explica toda la ciencia detrás de esto con lujo de detalles. http://www.youtube.com/watch?v=cX-zD8jKne0 Se llama “Delayed Cord Clamping grand rounds Part I” del Dr. Nicholas S. Fogelson

Este artículo ha sido publicado originalmente en la revista Contenido del 15 de septiembre del 2011.