lunes, 31 de enero de 2011

BRAIN- Lo que preguntas para decidir.



El derecho a decidir es algo que nos hemos ganado con el esfuerzo de mucha gente: algunos revolucionarios y rebeldes con causa. Afortunadamente, hoy en día, este derecho se aplica a la mayoría de los aspectos de la vida.


Ahora, decidimos en que queremos trabajar, que vamos a estudiar, con quien nos vamos a casar.... Pero hay áreas en las que todavía nos cuesta trabajo. Una de esas, y la que a mi más me concierne es en el área de la salud.


Los profesionales de la salud, tenemos la obligación de informarle, recomendarle, decirle cuales son los pros y los contras; ustedes mamás, papás, hijos, pacientes... la de decidir. 


 ¿Que tanto sabemos rechazar un tratamiento? 



En el curso de preparación para el parto de HypnoBirthing, hacemos varios ejercicios de como preguntar al doctor, para obtener la información que se busca, y para estar seguros de que si se hace alguna intervención, ésta es medicamente necesaria.  Este mismo concepto se puede aplicar a la vida diaria.

Algunos ejemplos de estas preguntas son:
“¿Cuál es la indicación médica para hacer esto?” 
“¿Hay algún riesgo si nos esperamos y luego decidimos? ”

Recuerdo que hace poco que prefería no ir al pediatra porque todavia no habia decidido poner las vacunas de mi bebe, yo sabía que me era muy difícil negarme a lo que él me recomendaba, entonces prefería no ir.  Afortunadamente, he logrado cambiar esta relación y ahora tengo algunas tácticas que me gustaría compartir con ustedes.

1.  La técnica BRAIN de Penny Simkin:


Siempre preguntar:
Beneficios 
Riesgos
Alternativas
Intuición (valorar lo que te dice)
Nada (hacer...)


2. Tomarme una semana para decidir.


Cualquier cosa que no es una urgencia, por ejemplo una vacuna, un anticonceptivo, vitaminas, pruebas, etc. 
Me tomo una semana para pensarlo bien, responder mis dudas y estar segura de mi decisión.  Al principio era un poco frustrante para mis doctores, mero ya se acostumbraron y funciona muy bien.  Si decido seguir con esto, estaré aquí la próxima semana.


3. No firmar nada "En caso de..."


Es obligación de los Hospitales y los médicos, presentar una hoja que explique los riesgos de ciertos procedimientos o explicarlos y pedirle al paciente que firme una hoja de Consentimiento Informado.  La mayoría de los hospitales se cubren y las ponen con las hojas que llenan los paciente al momento de la admisión.  Por ejemplo, en ella aceptas, transfusiones, procedimientos quirúrgicos, etc.
Firmarlas cuando no se te ha explicado nada, y cuando no es necesario ningún procedimiento; es ir en contra de tus derechos como paciente.


 Para poder ejercer en cualquier cultura el derecho de autonomía y dar el consentimiento a las acciones de salud que propone el médico es imprescindible que el paciente conozca los pro y los contra de hacer o dejar de hacer cada una de las acciones propuestas y es por ello que surge el concepto de consentimiento informado.4-6
El consentimiento informado no es una acción aislada destinada a lograr que el paciente firme un documento autorizando al equipo de salud a realizar tal o más cual tratamiento o investigación. Es un proceso donde todas las acciones para la salud en cualquiera de los tres niveles de prevención debe ser explicado.7
Cada examen complementario o fase del tratamiento, sobre todo los más invasivos y dolorosos, deben ser informados con los beneficios que aportaría y los riesgos que conlleva.
Es frecuente observar en cualquier sala de hospital que el paciente sin haber sido avisado previamente sea sorprendido y conducido sin explicaciones para hacerle investigaciones.




Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana
Consentimiento educado vs. Consentimiento informado

Fernando Núñez de Villavicencio Porro

4.  Saber decir "no"

Simplemente NO. 
A veces incluso sin explicaciones y sin dar lugar a discusión. Un "Esto No es para mi" debe ser suficiente.

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